DONAN UN “CORAZÓN” AL MUSEO
El Museo sigue creciendo, incorpora
nuevos elementos expositivos importantes, mejora la presentación de los mismos,
investiga sobre usos y costumbres y trata de transmitir de la forma más amena e
interactiva posible la cultura de estas tierras a todos los que nos visitan.
Cultura que trata de conservar pues corre grave riesgo de caer en el olvido.
Seguimos aportando nuestro granito de arena en esta larga lucha por la supervivencia del mundo rural tan abandonado por todos. Esta lucha requiere mucho esfuerzo y nosotros sacamos la energía necesaria del reconocimiento de las personas que nos visitan, normalmente muy concienciadas con estos temas, y sobre todo con el apoyo y la confianza que depositan en nosotros personas que aportan materiales o trabajo al enriquecimiento del Museo.
Seguimos aportando nuestro granito de arena en esta larga lucha por la supervivencia del mundo rural tan abandonado por todos. Esta lucha requiere mucho esfuerzo y nosotros sacamos la energía necesaria del reconocimiento de las personas que nos visitan, normalmente muy concienciadas con estos temas, y sobre todo con el apoyo y la confianza que depositan en nosotros personas que aportan materiales o trabajo al enriquecimiento del Museo.
Viene a colación este artículo porque
en fechas recientes el Museo ha recibido una interesante donación. José Manuel
López ha donado una antigua bomba de agua que se utilizaba para subir el agua desde el nivel de la calle a la segunda planta en la casa de El
Cercado en Montejo de San Miguel para abastecer
al retrete allí instalado cuando el pueblo todavía no tenía agua corriente.
La nueva bomba de agua instalada en el Museo.
La bomba, tras muchos años en desuso
y abandono, pasó al departamento de restauración para su puesta a punto. Se le
realizó una limpieza a fondo y se trataron las zonas oxidadas. A continuación se
desmontó todo el interesante mecanismo interno reponiendo los elementos
deteriorados y ajustando todas sus piezas.
Mango torneado en madera de fresno que ha habido que reponer en la bomba.
Llamó poderosamente la atención el
ingenioso sistema de funcionamiento y la precisión y ajuste de todas sus piezas
para cumplir su función de forma
perfecta. La visión de todos los mecanismos internos nos llevó rápidamente a
compararla con el funcionamiento de un corazón.
El resultado final de la “operación
a corazón abierto” fue todo un éxito, se ha conseguido que la bomba funcione
a la perfección y ya se ha instalado en uno de los pozos del Museo de
Maquinaria Agrícola.
Piezas del interior del tambor.
La vocación interactiva del Museo se ve complementada con
esta bomba que ya está lista para que los visitantes del Museo, en especial los
más jóvenes, puedan tener la experiencia de sacar agua con este antiguo e ingenioso
artilugio. Aprovechando la coyuntura y nuestras inquietudes didácticas también se interroga a estos
jóvenes visitantes sobre el nombre que reciben las personas que manejan las
bombas de agua, hasta que llegan a la conclusión de que son los bomberos.
DESCRIPCIÓN
La bomba pertenece al grupo de las
denominadas bombas de desplazamiento positivo y está concebida para estar
anclada verticalmente a una pared a un metro del suelo. El cuerpo principal de la
bomba tiene forma de tambor en el que se aloja todo el mecanismo principal que
se acciona con un manubrio haciendo movimientos de vaivén.
Esta bomba de agua está diseñada para estar anclada a la pared.
Del tambor sale un tubo hacia abajo
que se sumerge en el agua del pozo o aljibe. En el extremo del tubo se ubica una
válvula que permite la entrada de agua y evita que retroceda. La válvula está
protegida por una rejilla a modo de filtro que impide que entren elementos
extraños en el circuito. A esta parte se la conoce coloquialmente como cebolla.
El tubo con la válvula forma el sistema de absorción.
Del tambor, hacia arriba, sale
verticalmente otro tubo que es el que conduce el agua impulsada por la bomba hasta
su destino final.
Esta ingeniosa bomba dispone de 5
válvulas unidireccionales (antirretorno). Una válvula es una puerta, y si ésta
es unidireccional quiere decir que solo se puede abrir en un solo sentido, y el
agua solo podrá funcionar en ese sentido sin poder retroceder.
Los diferentes elementos que componen el mecanismo.
Es como la
puerta de nuestra habitación, entramos empujando la puerta pero para salir es imposible
salir empujando la puerta. No sucede lo mismo con las puertas batientes del
“SALOON” de las películas del oeste, a diferencia de la de nuestra habitación
se abren en las dos direcciones, es otro tipo de válvula distinta a la que nos
ocupa.
FUNCIONAMIENTO
Nuestra singular bomba bien la
podríamos comparar con el sistema circulatorio sanguíneo: corazón (aurículas y
ventrículos), venas, arterías, pulsaciones…
Sin pretender hacer un tratado de
cardiología vamos a hacer una pequeña incursión amena y divulgativa en nuestro
sistema circulatorio sanguíneo.
Recordamos que en la escuela nos
enseñaron que el corazón estaba dividido en cuatro cavidades, dos aurículas en
la parte superior y dos ventrículos en la parte inferior. La sangre llega a las
aurículas a través de las venas con un movimiento llamado diástole (absorción)
con lo que se llena de sangre las aurículas y en otro movimiento llamado
sístole (impulsión) pasa a los ventrículos llenando la cavidades,
inmediatamente produce se produce la sístole ventricular expulsando la sangre
por las arterias al exterior del corazón. La sangre va pasando por las
distintas puertas (válvulas unidireccionales) que obligan a la sangre a seguir
hacia adelante impidiendo su retroceso. Si las válvulas no funcionan correctamente
o los movimientos (pulsaciones, latidos) no van sincronizados tenemos un
problema, hay que consultar al cardiólogo.
Circulación de la sangre en el corazón.
Volviendo a nuestra bomba de agua veremos
que tiene muchas similitudes con el corazón, podríamos decir que nuestra bomba
es un corazón artificial. Este singular “corazón”
tiene dos cavidades en la parte inferior a modo de aurículas y una más grande
en la parte superior haciendo la función de único ventrículo.
Las pulsaciones
las provocaría la persona que maneja la bomba al mover el manubrio de izquierda
a derecha a modo de vaivén. Este movimiento del manubrio hace balancear la
pieza central del mecanismo que con esta oscilación provoca simultáneamente la
aspiración (diástole) y la expulsión (sístole) del agua.
El tambor de la bomba contiene los
mecanismos básicos, siendo el más importante la pieza central que tiene el
movimiento oscilante puesto que está anclada con un eje y que al estar perfectamente
ajustada a todas las paredes del tambor provoca la circulación del agua con su
movimiento. La pieza central hace la
función de émbolo y tiene dos válvulas.
La pieza divide el tambor en tres cavidades, una superior que ocupa medio tambor y dos inferiores separadas por
una pieza triangular con dos válvulas.
La pieza de bronce a modo de émbolo con sus dos válvulas. La pieza inferior con las otras dos válvulas.
Como podemos ver en el esquema 2,
cuando la pieza émbolo balancea hacia el lado izquierdo la válvula 1 de la
cavidad A (aurícula izq.) se cierra y la válvula 3 del cilindro se abre pasando
el agua a la cavidad C (único ventrículo) y de aquí la expulsa al exterior.
Simultáneamente la válvula 4 está cerrada y la cavidad B (aurícula dcha.) se
llena al absorber agua al abrirse la válvula 2 y como se ve en el esquema 2.
Circulación del agua en el interior al balancear el manubrio a la izquierda.
Cuando el émbolo se balancee hacia el lado derecho el agua de la cavidad B por la
presión pasará a la cavidad C y de ahí al exterior como ocurrió en el lado contrario. Al mismo tiempo la cavidad A se llenará de agua.
Circulación del agua por el interior de la bomba al balancear el manubrio a la derecha.
La persona que maneja el manubrio de
la bomba es la que marca el ritmo de extracción de agua. Un ritmo normal y
sostenido podríamos compararlo con unas pulsaciones adecuadas del corazón.
Si el ritmo es muy vivo podríamos asemejarlo a una taquicardia, mientras que si
debido al cansancio del operario tiene altibajos con acelerones y desacelerones
podría recordarnos a las arritmias cardiacas.
Con esta singular incorporación al
Museo inauguramos con buen pie este 2018 que esperamos sea provechoso para
todos.